Amig@s todos,
A propósito del FAM TRIP realizado el jueves 24 de junio pasado, reafirmamos el cómo las actividades outdoors ofrecen la oportunidad de observar nítidamente el proceso de cómo un grupo de personas que no se conocían entre sí en pocas horas evoluciona hacia un equipo.
Tal como sucede en las organizaciones, las experiencia outdoor training favorece para observar el surgimiento de la cultura de equipo. Diferente en cada caso siempre, determinada por las personalidades del conjunto de integrantes y configurando la personalidad grupal, siendo el todo más que la suma de sus partes.
A medida que fueron cohesionándose los equipos comenzaron a aparecer el sentido de pertenencia, variable que invita al ser humano desafiar su potencial. En donde, retos que en forma individual no realizarían, en nombre del equipo los ejecutan en forma espontánea.
Todo esto nos lleva a reflexionar en cómo las organizaciones son un medio de autorrealización para el ser humano, lógicamente una vez cubierta las necesidades básicas (citando al conocido Maslow).
El ser humano, desde las épocas más remotas ha necesitado formar parte de algo, de una tribu, de un equipo. Es un ser social por excelencia. Un ser de pertenencia.
Estas instancias nos llevan a pensar en la analogía de que en las organizaciones a pesar de ser parte de la globalización de éste gran sistema. También ofrecen la oportunidad al ser humano de volver a su instancia inicial, a su ser natural. En donde pertenece a un grupo de personas que se dirigen a un fin en común, que se unen por una misma razón y que en conjunto suman más que por separado.
En esto último, está el valor agregado que puede otorgar Recursos Humanos a sus colaboradores, más allá del incentivo monetario. El crear un ambiente cálido, un clima laboral propicio, relaciones laborales sanas, generar un objetivo que haga sentido a los colaboradores lleva a crear sentido de pertenencia y aquí está la clave para lograr el compromiso.
Hasta pronto!!
